YouTube

Mostrando entradas con la etiqueta esperanza. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta esperanza. Mostrar todas las entradas

domingo, 24 de mayo de 2015

Andamios infinitos

Suena.    Resuena.
Sordo rumor de insondable distancia.
Los sueños navegan en un océano de nubes.
La lejanía cuelga lianas dolorosas en el corazón/
    y es un vértigo azul la remota esperanza.

Oasis/
Fuentes doradas/
Espejismos de soles y estrellas.
A prisa corren los perros hambrientos del alma.
Los errabundos de la tierra transitan sobre espejos...
Reflejos de celaje embelesante.
Reflejo interminable...
¡Tan sólo campos de hielo!

El espíritu temerario
    ensambla andamios infinitos/
...y la estrella es anhelada aún...
¡Tenue luciérnaga de lo remoto!

Heme aquí
    dios de musgo y penumbra
        sobre los tejados humildes...
donde el fresco rocío
    arroja destellos/
brillo incipiente/
luz cercana de un nuevo amanecer.

Autor: Juan Carlos Luis Rojas

martes, 4 de marzo de 2014

Un brindis

Una marca más, en esta marcha
de tiempos medidos
en hitos convencionales...

Una vorágine de sensaciones
expectativas, esperanzas...
La sensibilidad más intensa
hacia el éxtasis o la frustración.

¡Sin embargo, es la emoción...
la medida más certera y profunda del ser!

La emoción en los silencios/
en la euforia
o en el grito...

La algarabía en torno de la soledad
coronando de lo álgido.
alguna desértica desolación.

Pero aún así/
¡innegable se mueve la esperanza!
El hombre apuesta una vez más
a sus anhelos
a sus sueños
y hay un cantar en el balcón de su alma.

Aquí estamos/
desde nuestra marcha/
en los términos de calendarios y relojes.
Y nos apoyamos
en el alfeizar de una ventana
en la penumbrosa habitación
que enumera y memora nuestros sueños...

Allá en lo alto las estrellas
donde navega una luna rutilante.
Meteoros fugaces
centellean en nuestra mente.

Acorde de voces se oyen,... de risas.
La flor de la emoción en los ojos
que transfieren un brindis,
en éter perfumado de vida,
en el sonar de cristales.

Y va mi abrazo extendido
familia, amigos, y aquellos...
que comulgan un sueño.
Seres de buena voluntad
que enarbolan una esperanza
ante la felicidad posible
en un nuevo tramo del tiempo.

¡Y nada más que esto!
¡Con la acción detrás del anhelo
habrá de sernos bendito!

AUTOR: Juan Carlos Luis Rojas